domingo, 11 de enero de 2009

Otra oportunidad

-Tenemos que hablar...
-¿Qué pasa?
-Hoy terminaré mi trabajo... luego renuncio
-¿Qué? Si es por lo que pasó...
-Mejor no sigas, no puedo seguir así. Me han ofrecido otro trabajo en Manchester. Hacia allí voy.
-Pero... ¡No puedes renunciar!¡No te lo consiento!
-Es mi última palabra. Ahora, vete y déjame terminar. Quiero salir de aquí cuanto antes...
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-¿Aún sigue aquí?
-Sí...está acabando...
-¿Quieres que acabe?
-No...quiero que se quede...
-¿Cómo pretendes que se quede?
-¿P-perdona?
-Que no sé qué pretendes, de verdad. Primero trabaja para ti, empezáis a salir, y luego la dejas porque eres tan cobarde que no te atreves a decirle que la dejas porque tus managers te lo han dicho...
-Lo sé, soy un idiota... aunque no lo entiendo...
-¿El qué?
-Por qué mis managers quieren que la deje...
-Por la estúpida imagen.
-¿Qué?
-Verás... no puedes ir por ahí presentando a tu novia, que es tu subordinada. Un actor de tu categoría no debería relacionarse con ese tipo de gente, de clase media...deberías echarte una novia modelo, cantante o actriz... o eso es lo que ellos piensan. No lo comparto, desde luego.
-Entiendo... menuda estupidez... ella es mejor que muchas actrices, modelos o cantantes.
-Ya lo sé.
-No es perfecta... es celosa, maniática, aterradoramente astuta...
-Vaya, qué rápido se encuentran los defectos...
-Pero es valiente, sincera, generosa y muy simpática. Y es que por muchos defectos que tenga... la quiero, y la seguiré queriendo por el resto de mi vida.
-¿Y por qué no le dices eso?
-Tengo miedo a su respuesta...
-La conozco, y sé que te irá bien. Porque, principalmente, tú eres su mundo. Además, sin intentarlo, no sabes qué te puede decir. Si no te arriesgas, si no eres sincero con ella, no te querrá volver a ver en su vida. Tal vez... si le dijeras lo que sientes, ella te daría otra oportunidad...
-¡Tú crees?
-Soy su mejor amiga... lo sé.
-Gracias...
-De nada...ahora vete, antes de que sea tarde...